Las Neurociencias están cambiando el paradigma educativo
Martes 12 de Julio de 2.011
Las tecnologías del diagnóstico por imágenes impulsaron a las llamadas Neurociencias, y con su progreso se ha vuelto posible dar sustento científico al estudio de los procesos mentales y cognitivos involucrados en el aprendizaje. Para ilustrarnos sobre estos avances entrevistamos a tres distinguidas investigadoras argentinas.
Los humanos no somos la única especie que instruye o entrena a su progenie, pero sí nos distinguimos de todos los demás animales superiores en el carácter, finalidad y sistematización de los procesos educativos que protagonizamos. La razón fundamental de nuestra supremacía como educadores reside, sin lugar a dudas, en que lo hacemos conscientemente, con método y con propósito, y lo venimos haciendo desde tiempos inmemoriales.
Sin embargo, hasta no hace mucho nuestro saber pedagógico era intuitivo, ideológico, y fatalmente superficial, construido pacientemente por prueba y error.
Los padres fundadores de la educación moderna nunca tuvieron el auxilio de ciencia exacta alguna más allá de la Estadística, simplemente porque durante siglos no hubo ciencia exacta que explicara los procesos mentales, y menos aún los del aprendizaje.
Comenio, por caso, era teólogo; Rousseau, un relojero, grabador y luego bon vivant de la Ilustración. María Montessori era filósofa, "psiquiatra" y "médica" (con las limitaciones que estas disciplinas tenían hacia fines del siglo XIX y principios del XX).
Por su parte, John Dewey era psicólogo, al igual que Piaget, Skinner, Vigotsky, Ausubel, Bandura, Bruner, Bloom, Gardner y una inmensa mayoría de los más influyentes pensadores educativos.
En los casi cuatro siglos que nos separan de Comenio, una multitud de pensadores ha venido construyendo teorías y promoviendo prácticas para provocar y perfeccionar el aprendizaje a partir de un conocimiento puramente fenomenológico y epidérmico de los mecanismos de la cognición.
Pero en las últimas tres décadas se perfeccionaron las técnicas de adquisición y análisis de imágenes por medio de la Resonancia Magnética Nuclear, y finalmente fue posible aplicarlas en tiempo real, esto es, en el mismo momento en que el individuo responde a estímulos o procesa información.
Hoy podemos identificar las áreas del cerebro involucradas en múltiples y variadas formas de aprendizaje y otras actividades cognitivas, y estudiar los mecanismos que gobiernan el flujo de datos e información durante la adquisición de saberes, el procesamiento de ideas y conceptos, o la simple recolección de memorias.
De pronto, las Neurociencias nos abren las puertas a un mundo nuevo, donde por fin será posible investigar y construir una Pedagogía científica, basada en más hechos y en menos suposiciones.
Para indagar sobre este novedoso espacio del conocimiento, Síntesis Educativa se puso en contacto con la Fundación INECO, y obtuvo el siguiente testimonio de tres investigadoras estrechamente ocupadas en el tema educativo: La Dra. Alexia Ratazzi, la Lic. Flavia Gannio y la Lic. Yanina Vaschetto, quienes aplican sus conocimientos en la Fundación INECO. (HMC)
La entrevista:
Brevemente: ¿qué es la Fundación INECO, a qué se dedica, cuál es su relación con la Fundación Favaloro, y cómo se conectan con el ámbito educativo?
La Fundación INECO apoya programas de investigación sobre la prevención, la detección y el tratamiento de los trastornos cognitivos y conductuales tanto en la población adulta como en la población infantojuvenil. Asimismo estimula la formación científica de profesionales y brinda educación a la comunidad general y profesional sobre los trastornos neurológicos y psiquiátricos (a través de charlas a la comunidad, simposios, talleres, etc). El Dr. Facundo Manes es director del INFF (Instituto de Neurociencias de la Fundación Favaloro) y de INECO (Instituto de Neurología Cognitiva).
La conexión de la Fundación INECO con el ámbito educativo se da principalmente a través de la organización y promoción de charlas de capacitación en los colegios acerca de diversos temas relacionados con las neurociencias y la educación, la realización de charlas a la comunidad relacionadas al aprendizaje en la población infantojuvenil, y a la organización de simposios de Neurociencias y Educación a los que asisten neurocientíficos y docentes para intercambiar ideas.
¿Qué se entiende por neurociencias, cuáles son sus técnicas y el alcance de sus observaciones?
Las neurociencias son un conjunto de disciplinas científicas que toman como objeto de estudio principal al cerebro humano. Las neurociencias intentan develar los mecanismos intrínsecos involucrados en el funcionamiento del cerebro en sus distintos niveles, y cómo el ambiente regula dicho funcionamiento, causando en última instancia la conducta humana.
Las técnicas utilizadas son variadas, desde las evaluaciones neuropsicológicas clásicas, hasta el uso de tecnologías más complejas como los potenciales evocados, la electroencefalografía, las neuroimágenes estructurales y funcionales (como por ejemplo: La resonancia magnética nuclear funcional), etc.
El alcance de sus observaciones es relativamente limitado, ya que falta responder a un sinfín de interrogantes, a pesar que la década de los '90 fue considerada la década del cerebro y se hicieron muchos descubrimientos importantes. La complejidad del cerebro es tal, que todavía queda mucho camino por recorrer en el área de las neurociencias.
¿Cómo ha cambiado la percepción científica del cerebro gracias a las nuevas tecnologías y el tratamiento de imágenes?
Las nuevas tecnologías (especialmente las denominadas "funcionales", es decir, que estudian "función") han permitido describir qué áreas del cerebro y de qué manera están involucradas en diversas tareas tales como el aprendizaje, el procesamiento de emociones, la toma de decisiones, la teoría de la mente, el procesamiento de estímulos sensoriales, la percepción del dolor, los actos motores, el pensamiento, la moralidad etc. Actualmente, se considera que el cerebro humano funciona en red, y este descubrimiento fue realizado gracias a las nuevas tecnologías aplicadas al estudio del funcionamiento del cerebro.
¿Es el cerebro un conjunto de módulos funcionales, o un órgano que es más que la suma de sus partes?
Las teorías modulares nos hablan de un cerebro conformado por un conjunto de módulos especializados, memorias diversas, inteligencias múltiples, sabemos que en el cerebro existen funciones más o menos localizadas, aunque sea en redes con zonas criticas y unos patrones de conexión neuronal que ejercen un control significativo sobre la conducta, por lo que podríamos afirmar que todo trastorno mental tiene un componente cerebral.
Pero no nos olvidemos que el ambiente y la experiencia ejercen acciones sobre el cerebro que resaltan unas pautas de actividad neuronal determinada y eliminan otras. Así, la experiencia y los aprendizajes vividos determinan y moldean las conexiones cerebrales a establecerse jugando un rol fundamental en el desarrollo cerebral de un niño.
La teoría educativa ha sido tradicionalmente construida por psicólogos. ¿De qué manera cambia el paradigma el aporte de las neurociencias?
Estamos bajo un cambio de paradigma cuyo objetivo es analizar y explicar el cerebro humano para facilitar la comprensión de la conducta humana, y ofrecer explicaciones novedosas que permitan profundizar el conocimiento acerca de las condiciones bajo las cuales el aprendizaje puede ser más efectivo, y que nos permita fundamentar el diseño de estrategias no convencionales dirigidas a atender las diferentes dimensiones y el desarrollo de la inteligencia. La idea es integrar disciplinas como Psicología, Neurología, Neuroanatomía, Neurofisiología, Neuroquímica, Neuropsicología, Biología, Física, Química.
¿Qué hallazgos de las neurociencias son más significativos en trastornos de interés educativo, como el retardo mental, el autismo o la hiperactividad?
El aporte de las neurociencias a la educación es proveer de elementos para diseñar estrategias de tratamiento con base científica para los trastornos de aprendizaje.
Gracias a las nuevas tecnologías tenemos conocimiento sobre las áreas o circuitos del cerebro cuyo mal funcionamiento origina trastornos específicos del aprendizaje. Como por ejemplo la región perisilviana izquierda tiene funciones neurolingüísticas y su disfunción ocasiona trastornos disléxicos o el área hipocámpica de ambos hemisferios tiene relación con la memoria a largo plazo y su alteración origina trastornos mnésicos, el síndrome de disfunción hemisférica derecha provoca síntomas discalcúlicos y disgrafía, así como alteraciones conductuales, cuya expresión más grave entra en el espectro autista (sistema límbico, región orbitofrontal). El síndrome disejecutivo se debe a alteraciones del lóbulo frontal y se caracteriza por déficit atencional, fallos en la planificación y anticipación, déficit en las abstracciones y otras manifestaciones conductuales.
¿Qué aportan las neurociencias en trastornos como la dislexia o la discalculia?
La dislexia es un trastorno específico del aprendizaje de la lectura que tiene un origen endógeno neurobiológico. La base fundamental de este trastorno es un déficit de tipo lingüístico, específicamente en las habilidades fonológicas.
Los estudios de neuroimagen permitieron constatar que el cerebro de un lector normal y el de una persona con dislexia difieren en sus patrones de actividad eléctrica y en la estructura cerebral. Se observó que, durante la lectura, la región parieto-temporal y la porción inferior y posterior de la región témporo-occipital se activan de manera diferente, siendo disfuncional en los disléxicos.
El área de asociación auditiva donde se procesan los fonemas se activa con menor fuerza en los disléxicos, razón por la cual se cree que se ponen en funcionamiento otros circuitos cerebrales compensatorios en las áreas de la corteza visual para poder decodificar el lenguaje escrito. Todo ello incide desfavorablemente en la velocidad de procesamiento de la información escrita y en su retención. Asimismo, se detectó una reducción de la asimetría del lóbulo frontotemporal característica del cerebro normal (comúnmente está más desarrollado el lado izquierdo) lo cual influiría en el procesamiento del lenguaje.
Estos hallazgos permiten comprender mejor las dificultades y las necesidades de instrucción diferenciada de los chicos con dislexia. Las neurociencias también han demostrado que con programas de tratamiento especializados, se pueden producir cambios a nivel de la actividad cerebral pudiendo en muchos casos restaurar el funcionamiento de las áreas afectadas hasta llegar a niveles cercanos a los lectores normales.
¿Es posible que las nuevas tecnologías estén forzando la aparición de nuevas formas cognitivas?
Está claro actualmente que el ambiente regula la expresión genética, y que de ésta interacción única surge la conducta humana. Esto explica la singularidad del ser humano, y la imposibilidad de que existan dos personas iguales.
El cerebro es un órgano que se adapta continuamente a la información que recibe del ambiente, por lo que es esperable que, si el ambiente cambia, también cambiará el cerebro. De esto se desprende que si un cerebro está expuesto a nuevos estímulos sensoriales o nuevas tecnologías (como por ejemplo: una computadora, videojuegos, TV, etc), el cerebro cambiará su configuración para adaptarse y responder a dicho estímulo.
De hecho, sabemos que, por ejemplo, los cerebros de los niños que miran mucha TV procesan los estímulos auditivos y visuales de manera diferente a los niños que no miran TV. En conclusión, los nuevos ambientes generan nuevas formas adaptativas y de respuesta por parte del cerebro.
Según las Neurociencias, ¿es válida la antinomia constructivismo/conductismo, o estamos frente a dos mecanismos igualmente eficientes, pero aplicables a diferentes tipos de aprendizaje?
Las neurociencias han aportado evidencias sobre qué ocurre en el cerebro durante el aprendizaje pero aun no se sabe exactamente cómo ocurre el aprendizaje y cuál es el efecto de las distintas prácticas pedagógicas en el funcionamiento cerebral de los niños.
Sí se sabe que el aprendizaje se relaciona con un cambio en las conexiones sinápticas de las neuronas o de un grupo de neuronas específico, y/o con la generación de nuevas sinapsis, que se originan como una respuesta a cambios internos al cerebro y/o a los provenientes del entorno. No existiría una única manera de aprender del cerebro sino que los mecanismos y las áreas cerebrales implicadas difieren de acuerdo con el tipo de información o conocimiento que tengamos que adquirir.
No es lo mismo aprender a leer que aprender a sumar y restar, y tampoco lo es el aprender fechas históricas precisas, la tabla periódica, una técnica deportiva o a tocar un instrumento musical. Intervienen distintas regiones cerebrales y se almacenan en diferentes sistemas de memoria. Es por ello que los métodos de enseñanza deberían diferenciarse también según el contenido de que se trate.
Desde este punto de vista, el aprendizaje significativo y el aprendizaje por repetición pueden coexistir y hasta pueden retroalimentarse ya que, por ejemplo, aprender de "memoria" fechas precisas de determinados hitos históricos posibilitaría tener un marco de referencia temporal para establecer relaciones conceptuales entre los acontecimientos históricos. Ambos tipos de aprendizaje son necesarios para la vida.
¿Es importante que los docentes reciban capacitación científica "dura" orientada hacia las neurociencias y la biología a fin de que sus prácticas profesionales estén sustentadas en una comprensión más completa de los procesos cognitivos?
Las Neurociencias están realizando importantes descubrimientos que nos permiten comprender mejor el funcionamiento del cerebro y las distintas áreas del desarrollo del ser humano. Se está avanzando cada vez más en el conocimiento de los mecanismos cerebrales involucrados en el aprendizaje, los principios que lo sustentan, la acción del ambiente, de la enseñanza escolar, etc.
Es necesario continuar construyendo puentes de entendimiento entre los investigadores y clínicos que se dedican a las neurociencias cognitivas y los profesionales de la educación a fin de que los hallazgos de las investigaciones puedan traducirse en un lenguaje accesible y en prácticas concretas para el ámbito escolar.
En INECO, los profesionales y docentes de los colegios tenemos la posibilidad de dialogar y enriquecernos mutuamente en los cursos de capacitación que brindamos sobre el desarrollo y aprendizaje normal de los niños y sobre los temas que frecuentemente generan interrogantes en ellos y que les demandan pensar ideas innovadoras frente a las problemáticas de aprendizaje y de conducta que se vienen complejizando con el correr de los años.
Entender la singularidad del funcionamiento cerebral de los niños cuando se encuentran en distintas situaciones de enseñanza y aprendizaje y conocer las condiciones que lo potencian contribuye sin duda a operar cambios en la manera de evaluar, en las estrategias de enseñanza, en el ambiente del aula, etc.
La relación entre las Neurociencias y la Educación está creciendo de tal manera que ya existe una nueva disciplina en plena construcción que recibe distintas denominaciones: Neuroeducación, Neurodidáctica, Neuropsicología del Aprendizaje, y representa el intento de integración de los aportes provenientes del campo de las Neurociencias con las Ciencias de la Educación.
Existen actualmente distintas ofertas de capacitación en el tema para aquellos docentes que tienen inquietudes y deseos de seguir desarrollándose en su profesión.
Las investigadoras de este artículo (Fundación INECO):
Dra. Alexia Rattazzi: Es psiquiatra infantojuvenil. Realizó su residencia y jefatura de residentes en el Hospital de Niños "Dr. Ricardo Gutiérrez" de la Ciudad de Buenos Aires. Actualmente, es directora de INECO Infantojuvenil, y jefa de Psiquiatría Infantojuvenil en el Instituto de Neurociencias de la Fundación Favaloro. Cumple funciones docentes en la Carrera de Psicología de la Universidad Favaloro, y en diversas Carreras de Posgrado en el área de Neurociencias de la misma universidad. Fue la organizadora principal del Simposio INECO de Neurociencias y Educación 2.010, desarrollado en el Museo Metropolitano de la ciudad de Buenos Aires.
Lic. Flavia Gannio: Es psicopedagoga por la Universidad del Salvador y Magíster en Ciencias de la Educación, con mención en Dificultades del Aprendizaje por la Pontificia Universidad Católica de Chile. Fue miembro de los equipos de Psicopedagogía en el servicio de Neurología del Hospital de Niños "Dr. Ricardo Gutiérrez" y del Hospital de Clínicas "José de San Martín". Ejerció la docencia en universidades privadas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Se desempeña en la clínica privada y en colegios de enseñanza bilingüe en el nivel inicial y primario, en tareas de prevención, evaluación y tratamiento de trastornos del aprendizaje y del desarrollo. Es coordinadora del departamento de Psicopedagogía de INECO Infantojuvenil.
Lic. Yanina Vaschetto: Licenciada en Psicología, graduada en la Universidad de Belgrano en el año 2.003. Tras su graduación se formó en neurociencias y rehabilitación cognitiva en FLENI, desempeñándose como neuropsicóloga en el Centro Educativo Terapéutico de Niños y Adolescentes en FLENI, Escobar hasta marzo de 2.011. Actualmente es Coordinadora del Departamento de Neuropsicología Infanto Juvenil del Instituto de Neurología Cognitiva de Buenos Aires (INECO). Realizó su especialidad en Neuropsicología Clinica en la Universidad de Buenos Aires. Realizó prácticas hospitalarias en el Hospital Municipal Infanto-Juvenil "Dra. Carolina Tobar García" y el Hospital Británico. Realizó cursos de postrado en Clínica de Niños, Trastornos Generalizados del Desarrollo, Intervención Temprana y Neuropsicología.
Enviado por: Rolando Francisco Montero Ramos.
Autor: Lic. Yanina Vaschetto, Dra. Alexia Rattazzi y Lic. Flavia Gannio.
Editor: Ricardo Santiago Netto (Administrador de Fisicanet).
Artículo de educación