Lengua egipcia
Lengua de Egipto desde tiempos remotos hasta el siglo XIV d.C. aproximadamente. Es la única lengua de la subfamilia egipcia perteneciente a las lenguas camito-semíticas con una historia mejor documentada: supera, al menos en 5.000 años a cualquier otra.
Las palabras en egipcio, como en las demás lenguas camito-semíticas, se suelen formar a partir de las raíces, que están constituidas por tres consonantes; el significado básico de la raíz se matiza gracias a los diferentes modelos vocálicos. Pero los verbos en egipcio desarrollan formas y funciones que difieren mucho de los de otras subfamilias camito-semíticas. La lengua coloquial es muy diferente a la lengua escrita. Se han encontrado muchas inscripciones formales e informales en tumbas, templos, columnas y estatuas que conservan el egipcio en su forma arcaica y que permiten, por lo tanto, aproximarse a la lengua viva de esa época y no sólo a través de documentos comerciales más comunes.
Partiendo de esos documentos literarios, el egipcio se ha dividido en cinco períodos: antiguo, (antes del 3.000 - 2.200 a.C.) fue la lengua del período predinástico durante el Imperio Antiguo (durante las Dinastías I-VI). Egipcio medio (c. 2.200 - 1.600 a.C.), es la lengua literaria del egipcio clásico; se cree que refleja la lengua coloquial de su época, en torno al 2.200 a.C. Su momento culminante coincide con el Imperio Medio y los períodos anterior y posterior al mismo (aproximadamente entre las Dinastías VII - XVII); se mantuvo como lengua literaria muerta como el latín en Europa hasta al menos el año 500 a.C. Hacia el 1.380 a.C., durante el primer período del Nuevo Imperio (de la Dinastía XVIII a la XXVI) el faraón Amenofis IV renovó también la lengua e introdujo lo que se conoce por egipcio tardío que fue nueva norma de la lengua escrita (desde el 1.550 hasta el 700 a.C.). Puede que estuviera basada en el lenguaje oral de aquellas fechas; presenta cambios fonéticos y gramaticales respecto a la lengua antigua. Un poco antes del 1.500 a.C. el Nuevo Imperio cedió su puesto a la hegemonía persa, y el egipcio demótico (que significa "egipcio popular"; c. 700 al 400 a.C.) se convirtió en norma para la lengua literaria, lo que le permitió mantenerse durante la conquista de Egipto por persas, griegos y romanos. Se escribió con caracteres distintos a los utilizados anteriormente (la escritura demótica) y otra vez sería la lengua coloquial hacia el 700 a.C. La aparición del copto (entre el 300 y el 1.400 d.C.), que es la última fase del egipcio; coincide, por un lado, con la sustitución de la forma tradicional de escritura por una adaptación del alfabeto griego, y por otro, con la aparición de la literatura cristiana. Pasado el año 700, el copto empieza a ceder terreno ante el árabe hasta que prácticamente desaparece entre los siglos XI al XIV. Se conserva todavía como lengua de la Iglesia copta.
Los egipcios desarrollaron tres tipos de escritura: La jeroglífica (usada en las inscripciones oficiales) y las dos formas de cursiva, la hierática (hasta el 650 a.C.) y la demótica (del c. 650 al 450 a.C.). En las tres, los símbolos han representado ideogramas, sílabas (consonánticas únicamente), una sola letra y determinadores (ayudas para interpretar los símbolos que tengan más de un significado). Las vocales no están representadas en la escritura (menos en el caso del copto) e, incluso, quienes lo han estudiado no pueden seguir la evolución fonética de ésta lengua más que a través de sus consonantes.
Escritura jeroglífica
Literatura Egipcia
Literatura del antiguo Egipto, registrada en inscripciones o escrita en papiros.
La antigua literatura egipcia se caracteriza por su amplia diversidad de tipos y asuntos tratados; abarca desde el imperio antiguo, del 2.755 al 2.255 a.C., hasta el período greco-romano, a partir del 332 a.C. Utiliza recursos literarios como el símil, la metáfora, la aliteración y el equívoco.
Formas literarias
La literatura religiosa del antiguo Egipto incluye himnos a los dioses, escritos mágicos y mitológicos, y una extensa colección de textos funerarios. El campo de la literatura secular incluye historias, literatura instructiva conocida como "textos de instrucción", poemas, escritos biográficos e históricos y tratados científicos, incluyendo textos matemáticos y de medicina. Destacan también numerosos textos legales, administrativos y económicos, así como documentos privados en forma de cartas, aunque no sean literatura propiamente dicha. Los autores de varias composiciones que datan del imperio antiguo y el medio, del 2.134 al 1.668 a.C., fueron venerados en épocas posteriores. Proceden de la clase culta de los funcionarios del gobierno del más alto nivel, y su audiencia estaba formada, sobre todo, por gente educada como ellos. En realidad, muchas composiciones literarias del imperio medio fueron compuestas como propaganda política para enseñar a los estudiantes, que aprendían a leer y a escribir copiándolos (en tablillas y fragmentos de arcilla), a ser leales a la dinastía regente. La mayoría de estos textos de instrucción los siguieron copiando los copistas del imperio nuevo, desde el 1.570 hasta el 1.070 a.C., 500 años más tarde, junto con otros textos de su momento, destinados a socavar el encanto de la nueva profesión militar. Algunas de estas historias incluyen elementos de la mitología y es posible que procedan de tradiciones orales.
Imperio antiguo
La literatura más antigua que se conserva, los textos de las pirámides, son inscripciones funerarias, grabadas en el interior de las pirámides de los reyes y reinas de la última parte del imperio antiguo, que se hacían para asegurar el debido destino del gobernante muerto en la vida eterna. Se trata de textos que proclaman himnos a los dioses y componen rituales de ofrendas cotidianas. Muchas inscripciones autobiográficas de tumbas privadas recuerdan la participación del difunto en acontecimientos históricos. Aunque no se conservan historias ni textos de instrucción del imperio antiguo, algunos manuscritos del imperio medio podrían ser copias de originales más antiguos. Un ejemplo sería la Instrucción del Visir Ptahhotep, compuesto de máximas que ilustran virtudes básicas (como moderación, sinceridad y bondad) que deben regir las relaciones humanas y describen a la persona ideal como un administrador justo.
Primer período intermedio
Después de la caída del imperio antiguo, mucha gente se apropió de los textos de las pirámide. A estos textos se les añadieron sortilegios nuevos, y se pintaron en ataúdes, por lo que se les ha llamado textos de los sarcófagos. Personajes no aristócratas continuaron inscribiendo sus tumbas con textos autobiográficos que a menudo contaban sus hazañas durante esta época de inquietudes políticas. A este primer período intermedio (2.255-2.035 a.C.) se atribuyen varias lamentaciones acerca del caótico estado de los asuntos, una de las cuales, El diálogo de un Hombre con su Ba ("alma"), es un debate sobre el suicidio; y otra, el ejemplo más antiguo de las canciones que cantaban los arpistas en los banquetes funerarios, aconseja "¡Come, bebe y sé feliz, antes de que sea tarde!"
Imperio medio
Además de los textos de los sarcófagos, la literatura religiosa del Imperio Medio comprende numerosos himnos al rey y a varias divinidades incluyendo un largo himno al Nilo, y textos rituales. Se siguió con las inscripciones de autobiografías privadas que contienen información histórica y los gobernantes empezaron a levantar pilares en los que se detallaban sus hazañas importantes. Tanto del Primer período intermedio como del imperio medio nos han llegado textos de instrucciones, siempre escritos en nombre del soberano reinante, narrando a su hijo y sucesor cómo varios acontecimientos históricos específicos influyeron en su reinado y cómo el hijo debería sacar provecho de los errores de su padre. La Sátira de los Oficios subraya los aspectos negativos de todas las posibles ocupaciones en contraste con la vida fácil del escriba. Entre la narrativa que se desarrolló durante el imperio medio destaca Aventuras de Sinuhé, que cuenta la historia de un oficial de palacio que huyó a Siria a la muerte del faraón Amenemhet I convirtiéndose en un hombre rico e importante; El Relato del Campesino elocuente, un hombre que hacía ruegos tan elocuentes para que le devolvieran sus asnos robados que fue encarcelado durante un tiempo para que los funcionarios pudieran disfrutar de sus discursos; Relato de un náufrago, que narra un encuentro fabuloso con una serpiente gigantesca en una isla exuberante, y la historia del rey Khufu y los magos. El papiro más antiguo que se conserva sobre medicina y matemáticas también pertenece a este período.
El imperio nuevo
Los textos funerarios del imperio nuevo, especialmente uno llamado el Libro de los muertos, se escribían en papiro y se metían en los sarcófagos. Entre los himnos más famosos de este período están los que proceden del reino de Amenofis IV, dedicados al dios del sol como única divinidad. El faraón Kamose, que reinó del 1.576 al 1.570 a.C., a finales del segundo período intermedio (1.720-1.570 a.C.), recogió las primeras etapas de la expulsión de Egipto de los hicsos (1.600 a.C.). Con el imperio nuevo, el número de inscripciones históricas reales se incrementó enormemente, mientras que los textos autobiográficos dieron paso a los religiosos. Tutmosis III mandó inscribir sus guerras en Siria tanto en una estela (llamada la estela poética) como en los murales del templo de Karnak. Ambos registros describen cómo el rey llama a sus consejeros, les informa de lo difícil de su situación, y éstos le aconsejan que intente la solución fácil, pero él les dice que no tiene miedo y que se atreverá a escoger el camino más peligroso; naturalmente, el rey lo hace y triunfa. Los últimos faraones del imperio nuevo, especialmente Ramsés II y Ramsés III, también dejaron relatos extensos de sus hazañas militares. Se conservan narraciones y crónicas poéticas de los éxitos de Ramsés II en la batalla de Kadesh contra los hititas. Estos textos instructivos, dirigidos a las escalas más bajas de la burocracia, ya no se basan en la suposición de un pensamiento correcto y un proceder justo que automáticamente conducían al éxito, sino en la meditación y la paciencia. Hay muchas historias que implicaban a personajes mitológicos como la Disputa de Horus y Seth; la destrucción de la humanidad, en la que los seres humanos son librados de la aniquilación emborrachando a la diosa Hathor con cerveza color de sangre; y El Relato de los Dos Hermanos, historia de un joven bueno que es traicionado por su malicioso hermano mayor. El viaje de Unamon relata las pruebas y tribulaciones de un agente enviado a comprar madera en Biblos. También existen varias colecciones de poemas de amor de este período.
El último período
Se conocen ejemplos de las diversas formas literarias egipcias de los siglos siguientes, dentro de la era greco-romana, que incluyen nuevas composiciones religiosas, relatos históricos privados y reales, instrucciones, historias y tratados científicos, como papiros sobre medicina, matemáticas y astronomía. Las enseñanzas de Anjsesongy, una colección de máximas muy pragmáticas, muchas de las cuales suenan como proverbios, y Las enseñanzas del papiro insinger, que retrata a la persona sabia como moral y piadosa, contrastan profundamente con los textos anteriores basados en la creencia en las recompensas en ésta vida. En este período se escribieron historias sobre las aventuras de varios magos, como un ciclo que relata las hazañas de un rey legendario, Petubastis, un cuento en su mayor parte mitológico que presenta una serie de fábulas de animales. Los contactos con la literatura griega coetánea son evidentes tanto en el ciclo épico como en las fábulas, por otro lado, los textos egipcios (incluyendo la literatura profética) también se tradujeron al griego, y además hay un conjunto de textos mágicos conocidos en ambas literaturas. De esta época data la famosa Piedra Rosetta, cuya inscripción ensalzando al rey Tolomeo V en caracteres jeroglíficos, demóticos y griegos, fue la llave para descifrar la escritura egipcia y por tanto para la fundación de la moderna egiptología.
Copto: Idioma antiguo de los egipcios, que se conserva en la liturgia propia del rito copto.
Demótico: Se dice de un género de escritura cursiva empleado por los antiguos egipcios para diversos actos privados.
Ideograma: Imagen convencional o símbolo que en la escritura de ciertas lenguas significa una palabra, morfema o frase determinados, sin representar cada una de sus sílabas o fonemas.
Secular: Que sucede o se repite cada siglo.
Bibliografía:
- Real Academia Española
- "Enciclopedia Microsoft ® Encarta ® 2.000"
Autor: Ricardo Santiago Netto. Argentina